La Refinería de Cartagena (Reficar), propiedad de la estatal colombiana Ecopetrol, inició un proceso ante un tribunal de arbitramento internacional en contra de la contratista Chicago Bridge & Iron Company por más de 2.000 millones de dólares por el sobreprecio en la ampliación y modernización de la planta.

Ecopetrol informó en un comunicado que el pasado 8 de marzo Reficar "presentó una solicitud ante la Cámara de Comercio Internacional, dirigida a iniciar un proceso arbitral en contra de Chicago Bridge & Iron Company" y su filial en Colombia por las fallas en la "ejecución del contrato EPC ((Ingeniería, Compras y Construcción) para la expansión de la refinería".

En su calidad de demandante, ahondó la petrolera, "Refinería de Cartagena S.A. ha fijado las pretensiones de su demanda en al menos 2.000 millones de dólares".

El proyecto de ampliación y modernización de la refinería comenzó en 2009 y estaba presupuestado en 3.993 millones de dólares, pero finalmente costó 8.016 millones, es decir 4.023 millones más de lo previsto.

Según medios colombianos, los abogados de Reficar alegarán ante el tribunal incumplimiento en el contrato, ocultamiento de información y negligencia en las obras de infraestructura.

El escándalo por los sobrecostos en Reficar estalló en febrero de este año cuando agentes de la Fiscalía colombiana registraron las instalaciones de la refinería en Cartagena y las oficinas en Bogotá en busca de pruebas.

Por el caso, la Procuraduría General abrió investigación disciplinaria en contra del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.

También hacen parte de la investigación el exministro de Hacienda Juan Carlos Echeverry, actual presidente de Ecopetrol, y el exministro de Minas y Energía Amilkar Acosta.

EFE